Tras repartir el material iniciamos un paseo de 10 minutos bajo la lluvia por los senderos del bosque de Dean hasta una de las 230 paredes que este contiene.
Al llegar a la pared vimos que la actividad iba a ser de tan solo un largo, y que para mas seguridad la escalada iba a ser realizada a modo ''escalada deportiva'', tipo de escalada que para mi gusto es aburridísimo.
Al ser el único que había escalado anteriormente fui el primero en realizar la actividad y en seguida me di cuenta de no iba a ser tan fácil como esperaba, ya que pese a ser en un tipo de roca nada adherente, en condiciones normales debería ser una escalada bastante fácil, pero la humedad generada por la lluvia, el moho que llenaba la pared y la tierra que contenían todas las presas generaron un punto extra de dificultad, ya que debido a la humedad el pie de gato no daba seguridad y las presas y agujeros de dedo no podías agarrarlos puesto que debido al moho y la tierra que contenian en su interior resbalaban un montón.
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